Cuando estamos a dieta hay que reducir la cantidad de aceite para cocinar. Esta vez os voy a dar un truco para poder conseguir ajos fritos con poco aceite.
Es importante utilizar buena materia prima para cocinar. Así que, elegir unos buenos dientes de ajo y picarlos a vuestro gusto.
Freír los ajos en una sartén con abundante aciete de oliva virgen hasta que queden bien doraditos.
Después pasarlos por un colador para separar los ajos del aceite.
De esta manera os quedará separado el aceite de los ajos y éstos los podréis utilizar para añadir a unas verduras, a un pescado o cualquier guiso.